Bueno, ha salido en la encuesta que la que estaría, sería la
madre, así que allá vamos. =)
Lucía observa a la mujer que ha venido a ver a Sara. Es una
mujer de unos 50 años, aunque se conserva bastante bien. Es una mujer no muy
alta, aunque está subida a unos altos tacones, que le hacen ganar unos
centímetros extra. Es delgada, y extremadamente elegante. Va vestida con una falda que le llega a la
rodilla y una camisa, combinando perfectamente colores y complementos.
Antes de irse Lucía a tomarse su tan merecido café, baja
Ricardo
-Cariño, ¿Por qué no me has dicho que venías?-le pregunta a
su esposa mientras le da un beso
-Era sorpresa-dice Rosana, la madre de Sara
“Madre mía…no me quiero ir a almorzar…quiero ver esta
situación…la esposa y la amante…”. Lucía sigue sin dejar de pensar que Sara y
Ricardo tienen algún tipo de relación.
-Lucía, ¿no tenías que ir a almorzar?-dice Sara sacándola de
sus pensamientos
-Emm…sí…sí, claro…
Lucía sale del despacho y se va a la máquina de café.
-Tu eres nueva, ¿verdad? La sirvienta de Sara, ¿no?
Lucia mira a la chica que le habla. Es una chica joven, de
unos 24 años, pelirroja, bajita y gordita. Tiene una cara redonda con algunas
pecas. Lleva un piercing en la nariz.
-Bueno, prefiero llamarlo ayudante jajajajaja Me llamo Lucía
-Yo María.
-Oye, ¿Por qué trabaja Sara aquí? ¿Y por qué tiene tantos
favores?
-¿No es evidente? Enchufismo puro y duro jajajaja Aunque la
verdad es que es una chica inteligente, aunque no lo parezca.
-Ya…era lo que pensaba…Enchufismo…
-¿Vas a ir la cena de empresa? Se pone bastante interesante
ver a los jefes bebiendo jajajaj
-No sé…No conozco a nadie…
-Me conoces a mí. Así que te obligo a venir jajajaj.
-Venga, está bien. Así por lo menos me reiré un poco y me
olvidaré de…-Lucía se calla de pronto, está a punto de escapársele su secreto
mejor guardado, el que no conoce nadie-Bueno, sí, pues ya nos vemos…
-Te lo digo por experiencia…Lo mejor que puedes hacer con
Sara es callarte e imaginarte una muerte lenta y dolorosa jajaja
-¿Tú también fuiste su ayudante?
-Sí, pero era demasiado exigente para mí…Bueno, me tengo que
ir a trabajar…¡Ya nos vemos!
Lucía se bebe rápidamente el resto de su café y llama a la
puerta del despacho de Sara, que ya está trabajando. Lucía se pone a trabajar,
hasta la hora de irse.
Durante el resto de la semana no pasa nada interesante. El día de la cena de empresa, Sara se pone
espectacular. Lleva un mini vestido negro palabra de honor, muy ceñido, que
destaca perfectamente sus curvas. Se suelta el pelo, se plancha el flequillo y
se maquilla de una manera muy sexy. Javi la mira cuando sale del baño. Pero la
mira de una manera especial. Se nota que no sólo siente una gran pasión por
ella, sino que es algo más. Ese amor secreto que siente desde siempre.
-Estás preciosa-le dice por fin
-Gracias…¡Tu también!
Y no le miente. Lleva un traje negro, con una camisa blanca.
Lleva la corbata en la mano.
-¿Me haces un el nudo?
-Claro.
Sara se pone delante de él y le hace el nudo de la corbata.
Luego le besa, despacito, disfrutando de ese beso, con lengua. Sara y Javi nunca se habían besado así. En
sus múltiples encuentros sexuales, apenas se habían dado algún beso, todos muy
salvajes, muy sexuales. En cambio, éste era un beso de amor.
Cuando se separan, se sonríen, incluso un poco tímidos. Sara
le da un abrazo.
-Venga, vamos…No quiero llegar tarde-le dice tras separarse
de él
-Sara, espera-dice él, cogiéndola del brazo y acercándola a
él.-¿Qué sientes por mí?
-No quiero llegar tarde, Javi.
-Sara, dímelo. ¿No ves que lo necesito saber?
-Lo sabes…estoy a gusto contigo, pero no quiero nada serio.
Tú puedes estar con otras, igual que yo
Él la suelta, claramente cabreado
-Venga, llegamos tarde
Cogen el coche y van hacia el caro restaurante donde se
celebra la cena. Sara y Javi se sientan con los jefes.
Poco a poco van llegando los trabajadores, hasta que
finalmente están todos. Cenan entre
risas, y llega la hora del baile.
-Javi, ¿bailas conmigo?-le dice Sara tendiéndole la mano
-Está bien…
La primera canción es una canción lenta, y ellos la bailan
muy apretados.
-¿Estás enfadado?
-No…sólo decepcionado…Pensaba que yo te gustaba.
-Y me gustas…Pero no quiero nada serio con nadie…
-¿Piensas estar toda tu vida así? La vida no es sólo estar
acostándote con unos y otros…Créeme, llegará un momento en que te sentirás sola
y desearás estar con una persona…
Sara le mira, sin decirle nada. Sabe que en el fondo tiene
razón, pero no quiere dársela.
-Voy a por algo de beber…
Se va hacia la barra
-Una Coca-Cola light, por favor
-Madre mía, ten cuidado, a ver si te vas a emborrachar…-dice
una voz detrás suya
Sara se gira y ve a Lucía. Va con un vestido rojo, cortito,
que se le adapta al cuerpo perfectamente. Está realmente preciosa.
-Yo no bebo…Y menos delante de los trabajadores y mi jefe.
-¿Nunca te sueltas el pelo?
-Sí, pero en los momentos que hay que hacerlo…Y éste no es
uno de ellos.
-Pues deberías beber…A ver si así estás más simpática y me
subes el sueldo. –Lucía intenta hacerla reir- Venga, quita esa cara de
tristeza, que estamos de fiesta…
-No tengo ganas de nada…
-Camarero, por favor, dos chupitos de tequila.-el camarero
se los prepara-Venga, ahora no nos mira nadie…Bébetelo…
Sara la mira desconfiada, pero al final decide beberse el
chupito
-¡Está súper fuerte! Ufffff-Sara nota como el tequila le
baja por la garganta
-Diooos deberías verte la cara jajajaj
Sara bebe un gran trago de su Coca-Cola. Ricardo se acerca a
ellas.
-Hola chicas…¿Os lo pasais bien?
-Sí-le responde Lucía…-Oiga, jefe, ¿le importa si nos
llevamos a Sara de fiesta después de la cena?
-No, claro que no jajaja Mientras el Lunes pueda volver a
trabajar jajaja
-Para eso me quieres, para que trabaje jajajaja-le responde
Sara.
Ricardo pide algo de beber y se marcha con los otros jefes.
-Camarero, un ron con Coca-Cola por favor-pide Sara una vez
Lucía también se ha marchado
Después de ese, vienen un par más. Sara intenta olvidar lo que le ha dicho Javi a
base de alcohol, aunque lo único que consigue es el efecto contrario…
“En realidad, Javi es lo que me conviene…Es amigo de la
familia, divertido, guapo…” piensa Sara mientras se acerca a Javi, sentado al
lado de su padre. Pero justo antes de llegar, Lucía la coge del brazo.
-¡Venga, nos vamos de fiesta!
-Pero tenía que ir a hablar con Javi…
-Ya mañana habláis.
Se van Sara, Lucía, María y algunas trabajadoras más a una
discoteca cercana al restaurante. Piden más copas. Bailan un rato, y de pronto
Lucía se fija que Sara no está con ellas. Va a buscarla, porque no se fía de lo
que puede hacer en su estado…
La encuentra fuera, sentada en el parking, llorando.
-Sara,¿Qué te pasa?
-Voy a morir sola…Javi tiene razón…Pero ahora es demasiado
tarde…-le dice entre llantos
-Venga, Sara, necesitas irte a dormir…Voy a avisar a éstas,
y te llevo a casa.
Lucía entra corriendo a la discoteca y les dice que se tiene
que ir. Se despide de ellas y, después de encontrar un taxi, se monta con Sara
en él
-Venga, Sara, dile a este hombre donde vives
-No me acuerdo-Sara se pone a llorar-Voy a morir sola y sin
llegar a casa
Lucía no puede evitar reírse de la situación y del
comentario de Sara.
Le indica la dirección de su casa. Cuando llegan, le paga al
taxista y baja a Sara
-Esta no es mi casa…
-Es la mía…Hoy dormirás aquí…
Sara abraza a Lucía.
-Gracias…
Entran en casa y Sara se mete en la cama de Lucía, como si
fuera una niña pequeña, jugando.
-Venga, Sara…Esa es mi cama…Tú dormirás en la de mi hermana…
-No. De aquí no salgo. Métete aquí conmigo…Por cierto, ¿tienes
algún pijama o algo?
Lucia le acerca uno. Sara se levanta de la cama y se quita
el vestido, quedándose en bragas y sujetador delante de Lucía. Lleva unas
conjunto negro, con bordados, muy sexy.
“Realmente tiene un cuerpo bonito…” piensa Lucía mientras la
ve desnudarse delante de ella.
Sara se pone el pijama y se meten las dos juntas en la cama.
-Lucía, sé que no me conoces de hace mucho, ¿pero tú piensas
que soy una mujer de hielo?
-Me parece que no has encontrado a la persona correcta…
Sara le acaricia el pelo mientras hablan.
-¿Piensas que llegará?
-Claro que sí…Puede ser que incluso hayas conocido a esa
persona…Pero no sepas que va a ser el gran amor de tu vida
Después de oír esas palabras, Sara, impulsada por el
alcohol, le da un beso
“Dioooos, me está besando…Y lo peor es que me gusta”. Lucia se
abandona a ese beso. Aunque nunca se había besado con ninguna mujer, esa
relación amor-odio que tiene con su jefa, mezclada con el alcohol, hacen que en
ese momento le apetezca estar con ella y nadie más.
-Sara, yo nunca…Ya sabes, con una mujer…
-Yo tampoco…Pero no sé por qué me apetece ahora mismo…
-Es todo por el ron que has bebido…
Sara la vuelve a besar, intentando callarla. Tímidamente, va
acariciándole, cada vez de manera mas atrevida. Poco a poco se desnudan una a la otra, entre
besos y caricias. Al principio lo hacen un poco cortadas, porque realmente no
saben lo que les pasa, pero luego, ya lo hacen de manera más pasional, casi
arrancándose la ropa. Se miran y en un instante saben lo que tienen que hacer.
Sara se tumba en la cama bocarriba. Lucia empieza besándola,
y cada vez va bajando más y más…Se detiene en su pecho, besando y succionando
sus pezones. Después, animada por la respiración agitada de Sara y esos suaves
gemidos que suelta, sigue bajando, hasta llegar a su pubis.
-¿Quieres que lo haga de verdad?-le pregunta Lucía
-Sí , por favor, házmelo- le responde casi rogándole.
Lucía empieza a lamer el clítoris de Sara, con suaves
movimiento de lengua. Sara arquea su espalda. Siente que nunca ha sentido tanto
placer como en ese instante. Finalmente, llega a un gran orgasmo, el más
intenso de su vida.
Entonces, Lucía sale de entre sus piernas, y vuelve a subir,
dándole suaves besos.
-No está mal para ser la primera vez, ¿no?-le dice entre
risas.
Se vuelven a besar, y Sara, que no quiere dejarla sin la
magnífica sensación que ha vivido, empieza a acariciarle suavemente el pubis.
-Sara, no te sientas obligada a hacerlo…
-Pero es que quiero hacerlo…
Suavemente, la tumba en la cama, y ella se tumba a su lado. Mientras
se besan, Sara sigue acariciando su pubis, cada vez un poco más rápido. Luego cuando
nota que Lucía tiene la respiración cada vez más acelerada, para. Cuando nota
que se tranquiliza un poco, pone su cabeza entre las piernas de Lucía y repite
la misma operación que le ha hecho su compañera hace escasos minutos.
-Oh, Dios, Sara…-gime Lucía-¡Diooos no pares!
Finalmente, ella también llega al orgasmo. Después de
besarse un buen rato, deciden irse a dormir, abrazadas y desnudas…
(Continuará…)
Bueno, siento no haber escrito hasta ahora, pero he tenido 2
días bastante ocupados…Gracias a todos los que leen esta historia…Y me gustaría
que comentarais que os ha parecido la escena de sexo…
Hola.
ResponderEliminarNo sé si será la opción ganadora de la votación, pero voy a matizar un poco el por que la elegí :).
Mi elección, "Se sentirán violentas y decidirán no decir nada", motivo, generar situaciones incómodas en su relación laboral con un toque erotico-humorístico, no necesariamente situaciones largas, cosas casuales e inesperadas ;).
Sobre la escena de sexo, escueta si comparas el volumen total del relato con el de esa parte :(.
Pienso lo mismo que Miss-A,el relato ha dado muchas vueltas para acabar llegando a un final que no esta mal, pero es cortito. Y la aparición de la madre a sido como, ¿ya esta?, le ha faltado algo de cuerpo.
ResponderEliminarLo siento si crees que soy dura, sigue así.
Gracias a las 2 por comentar...
ResponderEliminarLa verdad esque es la primera vez que relato una escena de sexo, y más entre 2 mujeres...así que para la próxima intentaré hacerlo mejor ;)
Me ha gustado mucho. Un besazo.
ResponderEliminar