Deseos de mujer (2)

Bueno, pues después de cerrar la encuesta, ha salido que Lucía y Sara se llevan mal…Que en principio es lo que yo tenía pensado! :P Así que voy a seguir…

Sara y Lucía suben a firmar el contrato al despacho de Ricardo.

-Jefe, esta es Lucía, mi nueva ayudante.

-Encantado-le tiende la mano-Espero que sepas contentar a Sara, es muy difícil de contentar, te lo digo yo jajajaj

Entonces, Lucía se fija en que Ricardo tiene una foto de Sara en su mesa. Le parece muy sospechoso, aunque no quiere decir nada.

-Espero saber contentarla jejeje.

Firman el contrato.

-Lucía, espérame en mi despacho, que tengo que hablar con el jefe, ahora bajo.

Lucía puede ver como, a su parecer, Sara tontea con el jefe. Se ríen, e incluso le pide algo de dinero.

“Así que por eso está aquí…Se ha liado con un hombre mayor y rico para pegar un braguetazo” piensa Lucía, que ni se le pasa por la cabeza pensar que es su padre y no su amante.

Al poco, Sara baja al despacho y le explica a Lucía todo lo que tiene que hacer en su trabajo.

-Me llevarás la agenda, organizarás mis citas...Y espero que lo hagas mejor que tu predecesora

-¿Qué ocurrió con ella?

-Era una vaga…No le gustaba trabajar…Y muchas reuniones me las perdí porque no le dio la gana de apuntárselas.

-Tranquila, yo no soy así.

-Eso espero…bueno, nos vemos el lunes…Ven directamente a mi despacho.

Se dan la mano y Lucía sale de la oficina. Un par de días después de firmar el contrato, empieza a trabajar con Sara…Es un lunes por la mañana, muy soleado.

“¡Uffff no tengo nada de ganas de trabajar! Y menos con ella…Porque necesito el dinero, que sino…” piensa Lucía mientras se levanta de la cama.

Se mira en el espejo. “Dios, estoy horrible”, piensa, aunque es una exageración, puesto que es una chica atractiva. Morena, y con unos grandes y profundos ojos negros. Además, mientras que Sara presume de tener unas buenas curvas que tan locos trae a los chicos, ella es muy delgadita. Se puede decir que en lo único en lo que se parecen Sara y Lucía es en la edad, pues las dos tienen 25 años.

Se pone la ropa que ha dejado preparada en la silla, desayuna rápido y va al garaje a por su coche. Al verlo, piensa en el golpe que tuvo con Sara y se da cuenta de lo realmente difícil que va  a ser estar de Lunes a Viernes de 9 a 3 con ella.

Mientras, Sara se levanta, aunque no en su cama, y con compañía. Se trata de uno de sus muchos rollitos, Javi, un compañero del trabajo, el jefe de marketing. Tiene 2 años más que Sara. Es un chico rubio oscuro, con unos preciosos ojos azulados. Tiene un cuerpo bonito, no demasiado musculado, pero tonificado. Es un niño rico y pijo, un antiguo amigo de la familia de Sara.

-Mmmmm buenos días princesa-dice dándole un beso a Sara-¿Cómo has dormido?

-Jajajaj no es que hayamos dormido mucho tampoco…Venga, vístete, tenemos que ir a trabajar.

-Llama al jefe y dile que estamos enfermos-dice cogiéndola del brazo y volviéndola a meter en la cama-y que no podemos salir en todo el día de la cama jajajaj Por lo menos eso sí será verdad jajajaj

-Eres un golfo…Yo tengo mil reuniones y mil cosas que hacer…-dice Sara soltándose de entre sus brazos.

-Eres de hielo…El que consiga enamorarte se merece una estatua jajajaj

Sara se ríe

-Ya sabes lo que hay…Venga, vamos, te invito a un café en la cafetería de la oficina.

Javi se levanta también de la cama y mientras Sara se pone el sujetador la abraza por detrás, cogiéndola suavemente de la cintura.

-No puedo esperar hasta esta noche para estar de nuevo contigo…Eres tan sexy…-le susurra al oído, y después se dedica a darle suaves mordisquitos en el lóbulo.

-Esta noche no puedo. Tengo noche de chicas con mis amigas…Aunque a la hora de la comida estoy libre…

Sara se separa finalmente de él y se terminan de vestir. Van con el coche de ella hasta la oficina y se meten a la cafetería, donde casualmente también está Lucía, que los ve entrar sonriéndose y tonteando.

-Hola Lucía-Sara se acerca a ella.-Mira Javi, esta es mi nueva ayudante, Lucía

-Encantada

-A ver si la ayudas más, Lucía, que luego no quiere quedarse conmigo en la cama jajajaj

-¡Javi, cállate!-le dice Sara, que inmediatamente pide un par de cafés.

“¡Mírala! No tiene bastante con el jefe que también se lía con otro de su edad…Madre mía…”

Sara recoge los cafés.

-Te invito-le dice Sara a Lucía

-Gracias-le responde secamente.

Sara y Javi se terminan de tomar el café entre risas. Luego, suben los 3 en el ascensor. Javi la acompaña hasta la puerta del despacho

-Nos vemos a mediodía…así que no quedes con el jefazo jajajaj-le dice Javi

-Jajajaj tranquilo, me reservo sólo para ti…Nos vemos luego

Lucía se pone a repasar la agenda con Sara

-Oye Lucía, que no le hagas caso a Javi, que dice muchas tonterías

-Es tu vida personal…Tú lo dijiste, hay que separar la vida privada de la profesional.

-¿Por qué eres tan borde? Sólo quería disculparme por si te habías sentido incómoda por lo que te había dicho Javi

-Mira, no puedo decirte lo que pienso realmente de ti, porque eres mi jefa…Sólo te digo que no me gusta la gente como tú, que se dedica a vivir la vida mientras las demás tenemos que partirnos el lomo para trabajar-Lucía mira su reloj-Eso sí, son las 9 menos 5 así que te lo he dicho como persona normal y corriente, no como empleada.

Sara la mira sin creerse todo lo que ha dicho. Ella, que siempre ha querido trabajar, al contrario de su hermano Raúl, que se dedica a irse de viaje con su novia y a vivir de los lujos que la gran fortuna familiar le permite

-Bueno, ahora son las 9, ya eres trabajadora-le dice Sara-Así que dedícate a tu trabajo.

Se ponen cada una con su trabajo. A media mañana, Sara se levanta de su silla

-Voy a hablar con el jefe. Si alguien me llama, le dices que le llamaré más tarde, aunque si es urgente, pásamelo a la extensión 372

-Si, ya…Entendido…

Sara sube a hablar con Ricardo.

-Hola papi…¿Podemos hablar?

-Sara, no soy tu papi…Ahora soy tu jefe…

-Pero necesito hablar con mi padre…¿Yo estoy aquí por méritos propios o por ser tu hija?

-Estás aquí por ser la mejor de tu promoción, y que nadie te convenza de lo contrario, Sara

Ella se acerca a él, le da un abrazo, y, casualidades de la vida, Lucía entra.

-Emmm…lo siento, perdón…Sara, te esperan abajo, era urgente por eso he subido

Sara se separa de Ricardo

-Vale, pues jefe, nos vemos luego.

“No se corta un pelo” piensa Lucía

-Por cierto Lucía, no sé si Sara te habrá dicho algo, pero el viernes  es la cena de empresa. ¿Contamos contigo?

-No, no me había dicho nada…Me lo pensaré, y le diré algo señor.

Sara y Lucía bajan

-¿Qué haces tu aquí? –pregunta Sara al ver a la persona que hay en su despacho-Lucía, es la hora de tu descanso, ¿no?

-Sí

-Pues vete a tomar un café o algo y déjanos a solas…

(Continuará…)

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